Se entiende por masaje circulatorio el que se realiza mediante técnicas específicas encaminadas a favorecer el riego sanguíneo y activar el movimiento de la linfa. Una mejora en la circulación sanguínea favorece la llegada de nutrientes a las diferentes células del cuerpo, así como una mejora en la eliminación de toxinas y productos de desecho producidos por el metabolismo. Así mismo la activación del sistema linfático favorece la eliminación del exceso de proteínas y líquidos intersticiales, lo que ayuda a prevenir y en su caso, a eliminar el edema.
El masaje circulatorio incide directamente sobre el retorno venoso, pues las venas recorren el cuerpo de forma superficial y es ahí donde incide directamente la maniobra del masajista, que se realizará siempre en dirección distal-proximal, es decir, desde las extremidades en dirección al corazón. Igualmente la propia acción del masaje provoca un aumento en la temperatura de la zona tratada, favoreciendo el riego arterial y provocando un gran aporte de sangre o hiperemia. Este aumento del aporte sanguíneo resulta altamente beneficioso tanto para los músculos y la piel como para el resto de órganos internos.
El masaje circulatorio está especialmente indicado para personas con problemas de pesadez, inflamación, entumecimiento o cansancio en las piernas, obesidad, celulitis, edemas, cansancio general, tensión nerviosa e insomnio.
Esta contraindicado en personas con problemas importantes de varices, trombos, flebitis y otras enfermedades claudicantes.
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Hoy en día las intervenciones de cirugía estética que con más frecuencia se llevan a cabo son las relacionadas con la eliminación de exceso grasa corporal localizada, ya sea por liposucción, lipólisis, lipectomía o abdominoplastia.
Cualquiera es estas cirugías requieren de un postoperatorio, más o menos prolongado en función del tipo de intervención. En cualquier caso, todas ellas van a requerir de unos cuidados recuperadores con el fin de obtener los mejores resultados y prevenir efectos secundarios indeseados. Todos aquellos que opten por una de estas ténicas deben tener en cuenta la importancia del proceso posterior a la operación, pues de él van a depender en gran medida los resultados a largo plazo.
Al margen de un correcto control dietético, la adecuada hidratación, el uso de la faja compresiva y la debida higiene, juegan un papel muy importante en la recuperación los masajes post liposuccion. Actualmente casi la totalidad de las clínicas estéticas recomiendan su uso como obligado en el proceso de recuparación postoperatorio. Una de las técnicas manuales que mejores resultados obtiene es el drenaje linfático manual. Es esta un terapia manual compleja que debe ser llevada a cabo por un masajista profesional formado en esta técnica pues de la realización de sus precisos movimientos, el ritmo adecuado y la presión correcta dependerá la obtención de un óptimo resultado. La linfa debe ser drenada de forma lenta y suave, por lo que una realización de movimientos rápidos y bruscos dificultan el correcto movimiento de la misma. Tras someterse a una intervención de este tipo los pacientes presentan una piel tensa, inelástica y muy sensible, refiriendo zonas especialmente dolorosas, el drenaje linfático genera un rápido alivio y una notable mejoría en los aspectos anteriormente citados.
Beneficios de los masajes postoperatorios tras una liposucción:
- Acelera el proceso de cicatricación, tanto externo como interno
- Rápido alivio del dolor y la hipersensibilidad de la piel
- Ayudan a reabsorber los hematomas y la equimosis
- Devuelven a la piel su elasticidad y mejoran su aspecto general
- Evitan o en su caso eliminan el edema y la acumulación excesiva de líquidos
- Recuperan el aspecto general de la zona intervenida con mayor rapidez
- Evitan la flaccidez y aceleran la regeneración del colágeno
- Mejoran el sistema inmunológico
- Tienen un importante efecto sedante sobre el sistema nervioso
- Mejoran la circulación venosa de retorno y por tanto aceleran la cicatrización y la recuperación
- Importante efecto de elmininación de toxinas y fuidos intersticiales
- Ayudan a rehidratar la piel y a su renovación eliminando células cutáneas muertas
- Reducen rápidamente la inflamación de la zona tratada
Es por estos motivos entre otros que usted debe recurrir a los masajes post liposucción, garantizando así que los resultados serán lo deseados y además prolongar estos en el tiempo. Con la realización de entre 10 y 15 sesiones de Masajes Post Liposucción usted apreciará una sorprendente recuperación y un mejor remodelamiento de las zonas sometidas a cirugía.
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